Y un día iba a llegar este día pero tampoco pensé que me iba a poner tan mal. El día en que vería firmar los papeles de venta del auto que tantas alegrías me dió y tantos recuerdos compartió conmigo, lo que podría considerar "mi primer auto" aunque realmente no fuera así, el 11 compartió mucho conmigo y el hecho de ver esos papeles firmandose me hizo sentir como Maradona cuando le cortaron las piernas, porque sentí lo mismo, que me estaban cortando las piernas. Muy pocos creo que van a saber lo que significa ese auto para mi y pocos van a entenderme cuando me refiero a todo lo que compartimos juntos -si seguían el blog viejo posiblemente si lo hagan- Decir adios, es crecer; eso me enseño la vida y otra vez tengo que sacar una sonrisa y salir adelante, sin mi pequeño 11 bordó.
El Sabado otro dueño va a estar arriba tuyo y vas a pasar a formar parte de otra familia, te voy a extrañar y mucho.
Se lo va a extrañar al pequeño.
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