Pese a las distracciones que pueda llegar a tener, sigo sintiendo que algo me falta; que me falta ese cable a tierra, esa persona que se encuentre en mi misma sintonía y que sea a quién recurrir cuando mi cabeza no esté bien, con quién desaparecer cuando el piso esté lleno de lava y necesite huir de los ruidos y el alboroto, extraño tener una media naranja, extraño esa felicidad que ocasionaba tener tu otra mitad, en resumen pese a que mis amigos estén -y agradezco a todos por eso- me sigo sintiendo solo y necesito ese alguien que me saque de la rutina, que me haga reir, con quién pueda compartir las boludeces y también las cosas serias.
Necesito esa persona que me cambie totalmente y con la cual compartir tiempo signifique un viaje de ida a un lugar muy lejano de la realidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario